Estonia es un país situado en el norte de Europa, en la región del mar Báltico. Limita al norte con el golfo de Finlandia, al este con Rusia, al sur con Letonia y al oeste con el mar Báltico. Con una población de aproximadamente 1.3 millones de habitantes, el idioma oficial es el estonio. La economía de Estonia se basa en diversos sectores, como la tecnología de la información, la electrónica, la ingeniería, la madera, el turismo y los servicios financieros. El país se ha destacado por su desarrollo tecnológico y su infraestructura digital avanzada, siendo reconocido como uno de los líderes en la digitalización a nivel mundial. Estonia posee una naturaleza exquisita, que incluye bosques, lagos y una extensa línea costera. Los parques nacionales de Lahemaa y Soomaa son destinos populares para los amantes de la naturaleza, ofreciendo oportunidades para el senderismo, la observación de aves y otras actividades al aire libre. La historia y la cultura de Estonia son ricas y cautivadoras. Sus ciudades medievales, como Tallin, Tartu y Pärnu, son conocidas por su impresionante arquitectura histórica y sus encantadoras calles adoquinadas. Además, Estonia se enorgullece de su tradición coral, con festivales de canto que atraen a numerosos participantes y espectadores. La gastronomía estonia fusiona influencias escandinavas, rusas y alemanas. Entre los platos tradicionales destacan el verivorst (salchicha de sangre), el mulgipuder (pudín de patata con tocino) y el leivasupp (sopa de pan). Asimismo, Estonia es conocida por sus licores de hierbas, como el Vana Tallinn. Estonia es un país pequeño pero próspero en el norte de Europa, reconocido por su vanguardia tecnológica, su impresionante entorno natural y su rica herencia cultural. Su encanto medieval, sus parques nacionales y su deliciosa gastronomía hacen de Estonia un destino atractivo para los amantes de la naturaleza, los apasionados de la historia y aquellos interesados en la innovación tecnológica.